Para todos es un momento difÃcil. Para algunos más que para otros. Algunos dÃas fueron buenos y otros no tanto.Â
A mi me costó, me cuesta. Pero ya estoy más adaptada. No es que me fue complicado quedarme en casa… No… De hecho me gusta hacerlo.Â
La cuarentena me movilizó otras cosas. Miedos sobre todo. Y esos miedos que se volvÃan inmanejables por la ansiedad, me paralizaron. No voy hablar sobre esos temores, pero si voy a contarles que la cuarentena me hizo enfrentarme a mis propios demonios. Y de hecho, hubieron algunos dÃas que parecÃa que perdÃa las batalla, pero salà adelante.Â
No estoy 10 puntos, creo que nadie lo está. Ni siquiera los que me acompañan.
Mi hijo también está sufriendo esta situación. No por el encierro, sino por la falta de una rutina. Está des-regulado pero también lo estamos nosotros. Lo valido, lo dejo ser...
Puedo decir que recién esta semana empezamos a estar más estables. Mi niño y yo. Mi marido la pilotea mucho mejor.Â
Me siento un poco más tranquila, más en el presente y no tanto en un futuro imposible de prever.Â
Me ayudó poner algunas cosas en orden… organizar mejor las tareas y las compras. Asà como tener un poco de espacio para mÃ, para pintar. También hablar y apoyarme en mi familia y amigos…
Y… de a poco asà estamos…
Cuenten me uds… me gustarÃa mucho leerlos! Les abro este espacio para que nos demos un poco de aliento y compañÃa!Â
Los quiero!